El presidente argentino, Javier Milei, desea el control del lugar y quiere reanudar conversaciones sobre el asunto, a propósito de la fecha que marca los 191 años de la ocupación británica de las Islas Malvinas.
«La posición de Brasil se remonta a 1833, cuando el embajador brasileño en Londres fue instruido a coadyuvar la protesta argentina ante el Gobierno británico por la ocupación de las islas», indica una nota del Palacio de Itamaraty, sede de la Cancillería.
Precisa que, «en línea con la posición argentina, Brasil favorece la creación de un ambiente de confianza que contribuya a la reanudación de las negociaciones bilaterales, conforme recomiendan las resoluciones de Naciones Unidas, organización en la cual la disputa es tratada, desde la década de 1960, como un tema de agenda de descolonización».
El texto asegura, además, que el compromiso brasileño con el apoyo a los derechos argentinos fue reafirmado recientemente en la Declaración Conjunta, en ocasión de la visita oficial del presidente Luiz Inácio Lula da Silva a Buenos Aires, en enero de 2023, y en el Plan de Acción para el relanzamiento de la Alianza Estratégica Brasil-Argentina, aprobado en junio pasado.
La posición brasileña se inscribe también en la visión de América del Sur como región de paz y cooperación, conforme al Consenso de Brasilia, aprobado por todos los países sudamericanos en mayo pasado, y la prioridad concedida al mantenimiento del Atlántico Sur como zona de paz y cooperación.
dfm/ocs
