De acuerdo con uno de los voceros de ese colectivo, Mario Almanza, la manifestación responde a la incertidumbre sobre la ejecución del plan de preservación y gestión segura de la mina de cobre de Donoso (Colón), tras una visita del Ejecutivo al yacimiento que consideraron una bufonada.
En esa llamada primera inspección técnica a la mina, encabezada por el titular del MICI, Jorge Rivera, se pretendía confirmar que realmente la filial de la trasnacional canadiense First Quantum había cesado sus operaciones, dañinas a la naturaleza.
Sobre la visita, Almanza indicó que los funcionarios del Estado parecían integrantes de la directiva de la empresa foránea.
Recientes informes del Centro de Incidencia Ambiental (CIAM) señalan peligros existentes en el proceso de cierre de Minera Panamá, los cuales no han sido revelados por el Gobierno.
Para el biólogo Isaías Ramos, del CIAM, es preocupante la carencia de una hoja de ruta clara y los riesgos asociados en ese lugar donde no hay movimiento de trabajadores ni maquinaria en el sitio, en apego al fallo de la Corte Suprema de Justicia que a finales de 2023 declaró a inconstitucional un contrato suscrito con el Estado.
CIAM alertó sobre la presencia de un tajo en la mina donde se observa una acumulación de agua con un azul intenso, similar al del sulfato de cobre (sulfato cúprico hidratado).
Además, que algunas paredes del tajo muestran señales de reacción con la lluvia y el aire circundante, y se pueden observar manchas cobrizas-amarillentas.
Según el documento, esta situación sugiere la posibilidad de la formación de drenajes ácidos con alto contenido de hierro y azufre en la zona, lo que podría contaminar las aguas superficiales y subterráneas del lugar.
El CIAM agregó la presencia de 500 mil toneladas de roca molida al aire libre, sin movilización de equipos ni trabajos de extracción y procesamiento en el proyecto.
En relación con las tinas de relave, se señala que hay abundante material proveniente de la explotación minera, que requiere supervisión y manejo constante debido a su potencial alta acidez.
Además, se recuerda que el proceso de manejo de estas estructuras, tal como fueron planificadas originalmente, no es sostenible a largo plazo.
En la mina, actualmente, hay aproximadamente 132 mil toneladas de material ya tratado con hasta un 26 por ciento de cobre listo para ser exportado, con un valor aproximado de 250 millones de dólares, almacenadas y generando emisiones de azufre, agrega el estudio.
De acuerdo con el comunicado del CIAM, es cuestionable la falta de especificaciones técnicas en la inspección organizada por los funcionarios gubernamentales, pese a que el ministro de Ambiente, Milcíades Concepción, asegurara que no hay contaminación.
La pasada semana varias agrupaciones sociales, sindicales y ambientalistas se congregaron en las puertas de entrada de Minera Panamá y reclamaron justicia y soberanía sobre ese territorio nacional, el cierre inmediato de las operaciones de la empresa y detener los daños ambientales.
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