No nos cansaremos jamás de defender el derecho del “hermano pueblo palestino” a existir en un Estado libre, independiente y soberano, con Jerusalén Oriental como su capital y en las fronteras previas a 1967, afirmó el jefe de la diplomacia bolivariana.
También respaldó cada uno de los esfuerzos internacionales orientados hacia el logro de una paz justa, integral y duradera de la cuestión palestina.
Coincidimos, afirmó, en que la situación sobre el terreno continúa su deterioro, lo cual, opinó, constituye una gran preocupación ante la falta de un horizonte político claro y de las políticas y prácticas criminales que, de manera sistemática y deliberada, son aplicadas por la potencia ocupante.
No solo para prolongar el conflicto, sino más grave aún, para “destruir la viabilidad de la solución de los dos Estados”, subrayó en su discurso en la reunión de cancilleres del Movimiento de Países No Alineados (Mnoal).
El jefe de la diplomacia venezolana aseveró que resulta evidente que Israel no tiene intención alguna de poner fin “ni a la ocupación ni a su brutal agresión militar”.
Acentuó que sus políticas están orientadas no solo para hacerse con el control total del territorio palestino ocupado y alterar su condición demográfica, sino también, y más grave aún, dirigida a “exterminar al pueblo palestino” como lo demuestran las acciones en curso.
Gil remarcó que estos actos constituyen un verdadero genocidio y se corresponden con las declaraciones incendiarias de altos personeros del régimen sionista de Israel, como el llamado al uso de armas nucleares contra el pueblo palestino y a arrasar, incendiar y borrar de la faz de la tierra la Franja de Gaza.
El canciller recordó que transcurrieron más de 100 días desde el inicio de la última espiral de violencia, dolor, muerte y destrucción, que cobraron la vida de decenas de miles de inocentes, de manera particular de mujeres y niños.
Resaltó que en la Franja no existe un solo lugar seguro y denunció que los hospitales, escuelas, almacenes de alimentos, los centros religiosos y de refugiados han sido todos blancos de los bombardeos indiscriminados por las fuerzas israelíes.
Apuntó que la población civil vive un verdadero infierno y la situación humanitaria “es verdaderamente insostenible”.
El ministro venezolano llamó a que urge alcanzar cuanto antes un cese el fuego y garantizar la aplicación de las normas del Derecho Internacional Humanitario y el respeto al derecho a la vida.
Denunció que la barbarie es el resultado del marco de la impunidad con la que Estados Unidos viene protegiendo al régimen israelí, inclusive dentro del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
Gil añadió que el resultado de esa política no es solo claro, sino doloroso, pues ante la pasividad de los órganos encargados de velar por el mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales, la potencia ocupante “se ha envalentonado como nunca antes” para cometer un genocidio transmitido en tiempo real.
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