El mandatario, que no aspira a la reelección, caso inédito en la historia de este país francófono de África, anunció la cancelación de la ley electoral en vigor en una alocución grabada difundida por la televisión a todo el país.
Sin embargo, el presidente apoya la candidatura de su primer ministro, Amadou Ba, uno de los 20 aprobados por el Consejo Constitucional para competir por el sillón ejecutivo.
Otra primicia para este país desde su proclamación de independencia de Francia, la exmetrópoli, en 1960, es la dilación de la consulta electoral.
La decisión presidencial choca con una advertencia hoy de la Liga de los Imanes y Predicadores sobre los peligros para el equilibrio político que comporta la posposición de elecciones en la cual exhortaron al presidente a evitar la adopción de medidas que alimenten la inestabilidad.
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