En la ocasión, decenas de miles de coreanos visitaron en Pyongyang el Palacio del Sol Kumsusan, lugar donde reposan los cuerpos del presidente Kim Il Sung, fundador el EPC, y del dirigente Kim Jong Il, quien también hizo enormes contribuciones a la construcción y desarrollo de las fuerzas armadas del país.
Otro sitio muy visitado fue la colina Mansu, un complejo de monumentos que recuerdan a los predecesores de la independencia nacional y momentos relevantes en la historia de la RPDC, incluida la fundación del Ejército Popular el 8 de febrero de 1948.
También, el Museo Conmemorativo de la Victoria en la Guerra de Liberación de la Patria y otros lugares de la capital y del resto del país, donde miembros del EPC, trabajadores y estudiantes colocaron flores para rendir tributo a los héroes y mártires de la revolución.
En Pyongyang y otras grandes ciudades se efectuaron espectáculos artísticos inspirados en las luchas y victorias de las fuerzas armadas.
Una de las actividades cumplidas por Kim Jong Un fue visitar la sede del Ministerio de Defensa Nacional, donde pasó revista a batallones de las fuerzas terrestres, marítimas y aéreas y, a nombre del Partido del Trabajo, felicitó a los mandos y tropas del EPC por su eficaz defensa de las conquistas del país.
El Comandante Supremo de las Fuerzas Armadas también asistió a una recepción ofrecida a altos jefes y oficiales del Ejército, la cual estuvo precedida por un espectáculo artístico.
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