El jefe de la fuerza política que ejerce el poder ejecutivo junto a los democristianos añadió que esperaba nuevas políticas como recortes fiscales para la clase media, los fundadores de empresas y las rentas altas, que finalmente no se incluyeron en el programa electoral.
Soder definió la derrota como un momento decisivo para ambas formaciones. ‘La Unión perdió en todas partes de forma amplia y profunda (…); ahora solo estamos en cuarto lugar entre los votantes jóvenes’, afirmó.
Más tarde advirtió sobre el peligro que representa para su partido ‘sentarse a las puertas del poder a la espera de entrar en él si las negociaciones entre los socialdemócratas, verdes y liberales no conducen a ninguna parte’.
Sus palabras aluden a los diálogos que por estos días buscan concertar alianzas entre las diferentes fuerzas políticas para formar el nuevo ejecutivo que llevará las riendas de la nación.
La copresidenta del Partido Socialdemócrata (SPD), Saskia Esken, calificó la víspera de constructivas las conversaciones con Los Verdes y los Liberales del (FDP) de cara a la formación de ese futuro gobierno de coalición.
Pero antes el FDP y los ecologistas dialogaron en busca de lograr la llamada alianza semáforo (por los colores que identifican a cada partido) junto al SPD, ganadores por estrecho margen de las legislativas del día 26.
Los primeros no descartaron integrar la llamada coalición Jamaica, coincidente con los colores de la bandera del país caribeño, fruto de una alianza con los democristianos en el poder y segundos en las parlamentarias.
Esos diálogos para crear pactos y lograr la mayoría necesaria en la Cámara Baja del Parlamento que permita formar un ejecutivo pudieran demorar meses.
Hasta entonces la actual canciller federal, Angela Merkel, continuará al frente del gobierno, aunque su partido, la Unión Demócrata Cristiana, también explora opciones que le permitan continuar en el poder.
Merkel declinó participar en la carrera electoral tras 16 años al mando del país y escogió al primer ministro del estado de Renania del Norte-Westfalia, Armin Laschet como su candidato.
Pese a encabezar las encuestas en un primer momento, su popularidad decreció debido a inconsistencias en la gestión ante la pandemia de la Covid-19, así como su accionar ante las inundaciones que afectaron el sur de Alemania en agosto pasado.
Esa situación permitió al partido socialdemócrata, con el actual vice canciller federal Olaf Scholz a la cabeza, alzarse con la victoria.
No obstante la Constitución germana prevé que las dos fuerzas políticas más representadas en el Parlamento pueden formar gobierno.
ga/ehl
