En una mesa redonda sobre el tema, el director general del INAC, Paulo Kalesi, informó que solo en 2020 el organismo registró más de 135 mil casos de violencia contra la niñez, de los cuales unos 56 mil 200 (41,64 por ciento) estuvieron vinculados al no reconocimiento por parte de los padres.
El conjunto de sucesos analizados incluyó agresiones físicas y morales, problemas en la provisión de alimentos, disputas por la custodia y el cuidado, negligencias parentales, violencia sexual, trata de menores e instrumentalización para la práctica de actos delictivos, dijo el especialista.
De enero a septiembre de 2021, indicó, el servicio de recepción de denuncias recibió 668 mil 774 llamadas sobre supuestos hechos de violencia contra los niños y el 36,73 por ciento tuvo su origen en la fuga de paternidad.
La negativa de reconocimiento legal por parte de los progenitores continúa siendo un problema fundamental, consideró el experto, quien advirtió sobre la vulnerabilidad de los infantes desatendidos.
Ningún sector de la sociedad angoleña está exento; entre los padres que niegan a sus hijos hay licenciados, técnicos, militares del ejército, policías, docentes, directores y gerentes, así de amplio es el abanico de casos denunciados al INAC, subrayó.
Kalesi lamentó los nexos entre ese fenómeno y los déficits asociados al desarrollo físico e intelectual de los niños y al acceso a servicios fundamentales como los de educación y salud.
mem/mjm