En una entrevista televisada, dijo que López Aliaga es “un fascista declarado, un totalitario; es verdaderamente un lobo y los carneros que lo siguen no saben que los tragará en cualquier momento”.
Sobre las pretensiones presidenciales del empresario e integrante del grupo católico ultraconservador Opus Dei, agregó que, si la extrema derecha lograra destituir al presidente Pedro Castillo y el empresario fuera elegido jefe de Estado, terminaría como el llamado Duce italiano.
“Un totalitarismo en el Perú sería el desastre total y él terminaría como terminó el fascista Benito Mussolini, colgado por partisanos (guerrilleros) en un pueblo de norte de Italia (el 24 de marzo de 1945), advirtió Torres.
Aclaró que lo dicho no expresa sus deseos contra López Aliaga, sino aborda la posibilidad que la población reaccione drásticamente contra un gobierno totalitario.
“No le deseo eso, es que una vez que se implante un gobierno totalitario en el Perú, la población va a reaccionar de otra forma”, expresó.
El ministro criticó a López Aliaga y a la jefa del partido Fuerza Popular, Keiko Fujimori, por rechazar una invitación al presidente Castillo, a dialogar sobre la situación creada por la moción vacancia que los partidos de ambos impulsan junto a Avanza País, del economista neoliberal Hernando de Soto.
Sobre ella preguntó “¿Toda la vida, va a vivir con el odio y rencor de que ha perdido las elecciones?”, en referencia a la enconada oposición de Fujimori contra los gobiernos de Ollanta Humala (2011-16), Pedro Pablo Kuczynski (2016-18) y de Castillo, quienes la derrotaron en sendos balotajes.
“Debe dialogar con el presidente y llegar a acuerdos, a fin de que se llegue a solucionar nuestros grandes problemas nacionales”, añadió.
Al calificar como ilegal e injustificada la pretendida vacancia presidencial, reconoció que el Gobierno ha cometido errores y los está corrigiendo, por ejemplo con el reemplazo de funcionarios cuestionados. “Sólo Dios y los imbéciles no se equivocan”, dijo.
mgt/mrs