El desenlace se produjo de una discusión por momentos altisonante, en la que se impuso el bloque formado ayer por partidos de izquierda y centro, que sumaron 76 votos, frente a 46 votos a favor de debatir la moción y cuatro abstenciones.
El paso de la moción al debate en el pleno necesitaba contar con 40 por ciento de los 130 votos, es decir 52 y el apoyo obtenido apenas supera el número de miembros de las tres bancadas promotoras de la vacancia, Renovación Popular, Fuerza Popular y Avanza País, de extrema derecha, que quedaron así aisladas.
El contundente resultado fue saludado con aplausos y vítores, mientras los legisladores triunfantes coreaban repetidamente: “El pueblo, unido, jamás será vencido”.
Durante el debate, los impulsores de la vacancia alegaban invocaban sospechas de corrupción de Castillo, lo acusaban de incapacidad para gobernar y sobre todo esgrimían argumentos crudamente anticomunistas.
Los legisladores de izquierda y centro señalaron la inconsistencia jurídica de la moción y acusaron a sus promotores de afanes de revancha por su derrota en las elecciones de este año, y señalaron la necesidad de estabilidad y gobernabilidad para enfrentar los grandes problemas de la población.
La legisladora que presentó la moción y posteriormente insultó públicamente al presidente Castillo, Patricia Chirinos recibió duras críticas con referencias a su origen como alcaldesa de un barrio limeño e integrante de un grupo político cuyos dirigentes están casi todos presos por corrupción.
La decisión de los partidos de centro de sumarse a la izquierda en el rechazo a la vacancia tuvo en cuenta, según sus voceros, la experiencia de la destitución parlamentaria del exgobernante Martín Vizcarra, en noviembre de 2020, que dio paso a una grave crisis política.
Muchas de las intervenciones exhortaron a Castillo a enmendar los errores que se le imputan, pidieron cambios ministeriales y señalaron la necesidad de investigar las acusaciones contra el mandatario.
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