La iniciativa es un intento por ayudar a esos países a recuperarse de las consecuencias de la pandemia por el coronavirus SARS-CoV-2.
La AIF utilizará sus fondos para brindar asistencia a 74 naciones de bajos ingresos, como la entrega de vacunas, la creación de puestos de trabajo perdidos por la Covid-19 y la lucha contra el cambio climático.
En una reunión virtual entre los donantes organizada por Japón, el ministro de Finanzas, Shunichi Suzuki expresó que el mundo sigue enfrentando una crisis sin precedentes debido a la Pandemia y ahora es el momento de la solidaridad mundial.
El Banco Mundial anunció por separado que ha decidido su paquete de reposición más grande hasta la fecha de 93 mil millones de dólares para el fondo.
La nación nipona y otros donantes juntos contribuirán con un total de 23 mil millones a la AIF.
El compromiso generoso de nuestros socios es un paso crítico para apoyar a los países pobres en sus esfuerzos por recuperarse de la crisis del Covid-19, indicó en un comunicado, David Malpass, presidente del Banco Mundial.
La AIF, fundada en 1960, ayuda a los países más pobres proporcionando donaciones y préstamos a bajo interés para proyectos y programas que impulsan el crecimiento económico y reducen la pobreza.
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