El funeral se realizó este lunes en Ighran, un pueblo del norte montañoso de Marruecos, donde el pequeño de cinco años de edad permaneció cinco días en medio de los esfuerzos por sacarlo con vida, y que siguió prácticamente toda la nación.
El rey Mohamed VI siguió de cerca los esfuerzos de rescate y expresó sus condolencias a los padres del pequeño en un comunicado emitido por el palacio durante el fin de semana.
La ardua tarea de rescate atrapó la atención mundial.
El cuerpo del pequeño fue trasladado en helicóptero a Rabat, pero no se aclaró si le realizó una autopsia.
El pueblo, de unos 500 habitantes, está rodeado de pozos profundos, muchos de los cuales se utilizan para regar el cultivo de cannabis, que es la principal fuente de ingresos para muchos en esta región pobre, remota y árida de las montañas marroquíes.
Durante la semana pasada muchos utilizaron la etiqueta #SaveRayan con la esperanza de que fuera encontrado con vida.
En la vecina Argelia, las autoridades lanzaron una campaña para cubrir todos los pozos existentes con la intención de evitar una tragedia como la del pequeño marroquí.
En un comunicado, las autoridades locales del estado oriental de M´Sila instaron a los propietarios a tomar las medidas necesarias para asegurar y cubrir sus pozos.
Un joven argelino murió en diciembre de 2018 al caer a un pozo de 30 metros de profundidad donde permaneció atrapado durante nueve días.
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