He sido jueza durante casi una década y me tomo muy en serio esa responsabilidad y mi deber de ser independiente, manifestó Jackson este lunes, en la primera de las audiencias que tendrán lugar esta semana ante el Comité Judicial del Senado.
La aspirante a convertirse en la primera mujer afroamericana en llegar a la máxima instancia judicial del país en más de 230 años de historia, expresó también que trabajará para defender la Constitución y la democracia estadounidense.
La audiencia comenzó a las 11:00 (hora local) y durante alrededor de cuatro horas se escucharon las declaraciones de los 22 senadores republicanos y demócratas del Comité, cuyo presidente, el demócrata Richard J. Durbin elogió el «registro de excelencia e integridad» de Jackson.
Los republicanos, por su parte, mantuvieron sus mensajes contra la nominada, a quien acusan de no ser rigurosa con el crimen, especialmente en casos de abuso infantil.
No obstante, los miembros de la fuerza roja reconocieron que no cuentan con los votos suficientes para detener el nombramiento.
A sus 51 años, la magistrada reemplazaría al juez saliente Stephen G. Breyer, quien planea jubilarse, y su confirmación no cambiaría el equilibrio de fuerzas de la corte, dominada por una mayoría conservadora de 6-3.
El martes y el miércoles, los miembros del comité harán preguntas a Jackson y el jueves escucharán el testimonio de testigos externos.
De acuerdo con el diario The Hill, su nombramiento le daría una importante victoria a Biden y a los demócratas de cara a las elecciones de medio término, en las que el control del Congreso está juego.
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