El expresidente Blaise Compaoré y el coronel Hyacinthe Kafando, jefe del destacamento de seguridad de Sankara al momento de su asesinato, eluden de momento la sanción por estar exiliados, mientras el tercero, el general Gilbert Diendéré, asistió a la lectura del fallo ya que cumple pena de prisión por intento golpista en 2015.
Sankara, un capitán del Ejército burquinabé, asumió el poder en 1983 tras derrocar al Gobierno en un golpe castrense con amplio respaldo popular, pronto devino un ícono del panafricanismo y del combate a la corrupción y la sujeción de su país a Francia, la exmetrópoli colonial.
En los apenas cuatro años de su mandato, impulsó la alfabetización, neutralizó la influencia en su país de los organismos financieros internacionales y promulgó una abarcadora reforma agraria.
Notorio por su postura antiimperialista en una época en la cual aun existían el sistema racista en Sudáfrica y prevalecían en varios países gobiernos prooccidentales, Sankara alcanzó una gran popularidad.
mgt/msl