Bador declaró que la división antiterrorista tiene la tarea de recopilar inteligencia procesable sobre cualquier grupo o célula terrorista en el país.
Los recientes ataques en Indonesia fueron devastadores. También estamos dispuestos a brindar asistencia a nuestros homólogos indonesios para frenar la amenaza del terrorismo, añadió.
Indonesia se vio conmocionada por dos ataques recientes: un atentado suicida con bomba en una catedral católica y un asalto con arma de fuego de una mujer en la sede de la policía nacional.
Este miércoles, Zakiah Aini ingresó a la sede de la Policía Nacional en Yakarta después de decirle a los guardias que quería visitar una oficina de correos dentro del complejo.
Aini, de 25 años, caminó tranquilamente hacia la oficina de correos antes de abrir fuego con un arma, y fue ultimada cuando los agentes de policía respondieron al fuego.
La mujer publicó una bandera del Estado Islámico en su cuenta de Instagram horas antes del ataque y también envió un mensaje de despedida al grupo de WhatsApp de la familia.
El domingo, una pareja se inmoló en la puerta de una iglesia católica en la capital provincial de Macasar (suroeste), tras hacer estallar una bomba de olla a presión, con saldo de 20 heridos, incluidos oficiales de seguridad de la iglesia y feligreses.
Según investigaciones preliminares, eran miembros de la organización Jemaah Anshorut Daulah, que ha prometido lealtad al Estado Islámico.
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