Ante la presión para tomar más medidas contra la creciente violencia en el país, el mandatario determinará la regulación de las llamadas «armas fantasma», las cuales no cuentan con número de serie porque se confeccionan con partes previamente adquiridas, explicó el medio.
La disposición también requeriría a los fabricantes que venden las piezas para ensamblar las armas obtener una licencia y hacer verificaciones de antecedentes de los compradores.
Otro de los cambios a ser anunciados, según la fuente, sería el nombramiento de Steve Dettelbach, un exfiscal de Ohio, como jefe de la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos luego de que se estancara en el Senado el nombramiento del candidato anterior al cargo, David Chipman.
El líder demócrata del Senado, Charles Schumer, este domingo imploró a la administración actuar más rápido para controlar la proliferación de artefactos letales antes de que más personas resulten heridas, o algo peor.
Las armas fantasma son demasiado fáciles de construir, demasiado difíciles de rastrear y demasiado peligrosas para ignorarlas, expresó el legislador en un comunicado.
Las estadísticas del Departamento de Justicia muestran que las fuerzas del orden público recuperaron en las escenas del crimen entre 2016 y 2020 casi 24 mil de esos dispositivos ensamblados, pero es imposible contabilizar cuántas circulan hoy en las calles.
La semana pasada, tras un tiroteo masivo que dejó seis muertos en la ciudad de Sacramento, California, Biden aseguró que adoptaría medidas para evitar ese tipo de crímenes, de los cuales en el país se registran más de 127 este año, según la organización Gun Violence Archive.
El jefe de la Casa Blanca ha recibido críticas por adoptar decisiones que se quedan cortas ante lo que él mismo llamó “epidemia que desangra al país” y las medidas hoy anticipadas pudieran estar encaminadas a mejorar su imagen y la de su Partido Demócrata de cara a las elecciones de mitad de mandato en noviembre.
Las muertes por armas de fuego superan en Estados Unidos a las provocadas por accidentes automovilísticos, según una investigación publicada en la revista Trauma Surgery and Acute Care Open.
Grupos defensores del porte de tales medios, como la poderosa Asociación Nacional del Rifle, se oponen a cualquier medida que emane del legislativo para limitarlas y controlarlas.
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