En la capitalina catedral Basílica Metropolitana Santa María La Antigua, monseñor José Domingo Ulloa, arzobispo de Panamá, resaltó en este Domingo de Ramos que la población no puede vivir encerrada por miedo a la dolencia y debe salir, pero con responsabilidad.
De su parte, el Ministerio de Salud autorizó la realización de procesiones y actividades relacionadas con la conmemoración, al tiempo que eliminó la obligación de usar mascarillas en espacios abiertos cumpliendo con el distanciamiento físico.
Sin embargo, las autoridades religiosas dejaron claro que cada arquidiócesis del país establecerá las normas para la realización de sus actos litúrgicos.
Mientras, el Ministerio de Seguridad confirmó el despliegue de más de 22 mil efectivos para respaldar estas conmemoraciones, en los que como regla se incrementa el traslado de las familias hacia diversos territorios del interior del istmo.
«Las unidades se desplegaron de frontera a frontera y de costa a costa para garantizar la seguridad de los panameños», afirmó el coordinador de la Fuerza de Tarea Conjunta y director del Sistema de Protección Civil, José Donderis.
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