A través de un comunicado, Acnur reconoció los desafíos que enfrenta la nación y convocó al gobierno a defender los principios de protección de refugiados, bajo la no devolución y el derecho a la repatriación voluntaria con seguridad y dignidad.
La institución de Naciones Unidas reiteró también la necesidad de que los ciudadanos sirios y palestinos en el país deben cumplir y respetar las leyes nacionales libanesas.
Según cifras de Acnur, nueve de cada 10 pobladores sirios en el territorio viven en penuria extrema y casi la mitad de los libaneses se encuentran por debajo del umbral de la pobreza.
Desde 2015, el Líbano ha recibido casi nueve millones de dólares en ayuda a los refugiados sirios, palestinos, los libaneses vulnerables e instituciones públicas en el marco del Plan de Respuesta a la Crisis del país.
Este viernes, el gobierno libanés expresó que el Estado ya no era capaz de atender a los más de millón y medio de refugiados sirios en la nación y pidió mayor colaboración internacional para enfrentar la actual situación.
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