“El exsecretario de Defensa de #EEUU, Mark Esper, admite en su libro `Un juramento sagrado` que propuso a Juan Guaidó asesinar al hermano @NicolasMaduro. ¿Con qué moral #EEUU puede hablar de respeto a la democracia para excluir al pueblo de Venezuela de la Cumbre de las Américas?”, escribió en un tuit el líder del Movimiento al Socialismo.
Morales reiteró en su cuenta de Twitter su admiración a Maduro por vencer ese intento de magnicidio y al “pueblo revolucionario de #Venezuela por haber derrotado este plan de intervención militar yanqui. La #PatriaGrande defiende su libertad con unidad y dignidad”, expresó.
El primer expresidente indígena de Bolivia se refirió al tema de manera reiterada en la red social después que el subsecretario de Estado norteamericano, Brian Nichols, confirmó que Estados Unidos excluirá a Cuba, Venezuela y Nicaragua de la reunión continental.
La víspera lamentó esa decisión de Washington y recalcó que “una cumbre que excluye es una acción política que destruye”.
Insistió Morales en que el pecado de esas tres naciones fue liberarse del intervencionismo del imperio norteamericano y defender su soberanía.
También la semana pasada advirtió que “la Cumbre de las Américas está a punto de fracasar, no por la falta de voluntad de diálogo de los gobiernos de América Latina y el Caribe sino por la arrogancia y el desprecio de EE.UU. contra nuestros pueblos”.
El jefe de Estado de Bolivia, Luis Arce, anunció igualmente estará ausente de la IX Cumbre de las Américas por considerarla un encuentro exclusivo, no representativo de los valores de la nación altiplánica y de las necesidades de la región.
Con el pretexto de que La Habana, Caracas y Managua violan los derechos democráticos, el país anfitrión decidió excluir a los tres Estados que proclaman como divisa la justicia social y rechazan el modelo neoliberal preconizado por la Casa Blanca.
La disposición generó el rechazo de líderes y gobiernos del continente y de organismos internacionales como la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños y la Comunidad del Caribe.
El foro hemisférico sesionará en la ciudad de Los Ángeles del 6 al 10 de junio con una agenda que abordará asuntos relacionados con migración y salud, puntos en los cuáles las naciones excluidas tienen mucho para aportar.
La advertencia de Arce sobre su posible ausencia pone en tela de juicio la legitimidad de la reunión, en la cual también estarán ausentes, por igual motivo, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, y varios gobernantes caribeños.
mgt/jpm