La propuesta se someterá a aprobación por el Bundesrat (Consejo Federal) en la jornada de mañana jueves y entrará en vigor, de ser validada, el próximo sábado.
El ‘freno de emergencia’ modifica la Ley de Infecciones contra la pandemia, aprobada el año pasado, y prevé la activación automática de restricciones nocturnas de movimiento a partir del centenar de casos semanales por 100 mil habitantes.
La legislación regula la suspensión de la docencia, la obligatoriedad de someterse a dos tests semanales de antígenos y la limitación de reuniones para regiones con alta incidencia de la enfermedad.
Tras su implementación regirá un toque de queda entre las 22:00 hasta las 05:00, hora local del siguiente día, aunque serán posibles los paseos o el deporte individual hasta la medianoche.
En contra de la normativa, propuesta por la coalición gobernante de conservadores y socialdemócratas, votó el ultraderechista partido Alternativa para Alemania (AfD), tras acusar al ejecutivo la canciller federal, Angela Merkel, de recortar las libertades individuales fundamentales.
Los Verdes se abstuvieron por considerar que esas medidas no son suficientes y debieron activarse antes.
Mientras, en las afueras del edificio legislativo, miles de manifestantes, entre ellos los llamados negacionistas, se pronunciaban contra el proyecto.
La televisión pública rbb ubicó en ocho mil el número de participantes en la protesta, que acabó disuelta por la inobservancia de las normas de distanciamiento y del uso de la mascarilla facial.
El propósito de la normativa gubernamental es establecer restricciones uniformes en todo el país para revertir la actual situación sanitaria .
La situación es ‘seria, muy seria’, expresó el ministro de Sanidad, Jens Spahn, quien justificó la aprobación de la medida bajo el argumento de que las vacunas y los test no son instrumentos suficientes para detener la propagación del virus.
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