Según el presidente de la Unión de Propietarios de Farmacias (Unprofa), Orlando Pérez, no se hará de inmediato la rebaja del 30 por ciento del precio de 170 remedios, según establece el Decreto ejecutivo que rige desde el pasado 15 de agosto por seis meses, prorrogables.
La medida indica que la rebaja deberá ser asumida desde los laboratorios fabricantes, que trasladarán a los distribuidores y estos a su vez a las farmacias.
Uno de los desafíos en la implementación de la normativa son los inventarios que ya existen con precios anteriores y todo el trámite que se debe hacer para aplicar la rebaja, indicó Pérez.
“No sabemos qué tiempo va a tomar la aplicación del descuento en los productos que ya las farmacias habían adquirido, porque primero depende de que los distribuidores nos reconozcan, agregó.
La mayoría de las farmacias, dijo, decidió poner en “cuarentena” los 170 productos que están en el listado, lo cual significa que están en sus inventarios, pero no disponibles para la venta.
El crítico panorama de altos precios de los fármacos en Panamá tiene lugar en medio de denuncias de organizaciones sociales que apuntan hacia ilegalidades de cinco grandes grupos oligopólicos que controlan el mercado y son considerados mafias farmacéuticas.
También ante el desabastecimiento de remedios, el Gobierno adoptó como medida paliativa la autorización a la Caja de Seguro Social de comprar de manera directa medicamentos a través de la Asociación Nacional de Laboratorios Farmacéuticos de Colombia, integrada por unas 32 empresas.
El primer embarque de apenas 27 medicamentos llegó el pasado fin de semana, y se espera el arribo de otros 30 fármacos, que no se adquirían hace cinco años.
Entre las medicinas se encuentran antineoplásicos, también para quienes padecen de asma, enfermedad obstructiva crónica, depresión, problemas de salud mental y para los que necesitan de trasplante hepático, entre otros productos.
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