El coordinador de esa plataforma defensora de los derechos humanos, Camille Occius, recordó que incluso en tiempos de guerra hay que proteger la vida de los periodistas.
«El asesinato de Tayson Latigue, conocido como Tijèn Jounalis, y Frantzsen Charles, en Cité Soleil, el 11 de septiembre de 2022, es un acto atroz. Condeno vehementemente este crimen que ha sumido en el luto a la prensa haitiana», manifestó Occius.
Los reporteros fueron baleados y sus cuerpos quemados cuando regresaban de la barriada de Brooklyn tras entrevistar a los padres de una joven de 17 años recientemente asesinada por las bandas armadas, de acuerdo con medios locales, y otros cinco comunicadores pudieron huir cuando los individuos abrieron fuego.
Con la muerte de Latigue y Charles suman cinco los periodistas asesinados este año por pandillas que operan en Puerto Príncipe, en momentos en que aumenta la violencia e inseguridad.
A inicios de enero Wilguens Louissaint y Amady John Wesley fueron ultimados por bandas armadas que operan en la barriada Laboule 12, en el suroeste de la capital, mientras realizaban un reportaje sobre la creciente inseguridad.
Por su parte, Lazarre Maximilien fue baleado aparentemente por la Policía a finales de febrero cuando cubría una manifestación de empleados textiles que reclamaban aumentos salariales.
En mayo último la Oficina Integrada de Naciones Unidas denunció que al menos 19 profesionales de la prensa fueron asesinados desde 2000 y alentó al Gobierno a castigar esos crímenes.
“En Haití, la inseguridad de los periodistas y la impunidad esperada pueden favorecer la violación de muchos derechos humanos, además de la libertad de expresión y la libertad de prensa, así como fomentar otras formas de criminalidad”, deploró el organismo.
También instó a los poderes públicos a hacer todo lo posible para prevenir y castigar esos asesinatos, agresiones y amenazas contra los comunicadores.
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