Los fuertes vientos, lluvias torrenciales y el peligro de inundaciones incentivaron órdenes de evacuación para más de cinco millones de residentes en el suroeste del país.
De acuerdo con la Agencia Meteorológica (AMJ) el riesgo de desastres relacionados con los sedimentos aumentó significativamente en las prefecturas de Miyazaki, Oita, Kumamoto, Fukuoka, Ehime, Tokushima, Kochi, Hiroshima, Shimane y Yamaguchi, en algunas de las cuales hay ríos que superaron los niveles de seguridad.
A propósito, el Ministerio de Tierras, Infraestructura, Transporte y Turismo indicó la descarga anticipada de 123 represas, con el objetivo de evitar inundaciones al aumentar el embalse.
En cuanto a la movilidad de las personas, se suspendió la mayoría de los servicios ferroviarios hacia y desde las zonas bajo la influencia de Nanmadol, incluidos los servicios del tren bala Shinkansen.
Asimismo, las principales aerolíneas, Japan Airlines y All Nippon Airways, cancelaron en el día cientos de vuelos nacionales, con la consecuente afectación de unos 85 mil pasajeros.
El tifón, con ráfagas de viento de hasta 234 kilómetros por hora, tocó tierra la víspera a las 19:00, hora local, por la prefectura de Kagoshima.
El más reciente informe de la AMJ indicó que cerca de las 15:00, hora local, el fenómeno natural se encontraba a unos 40 kilómetros al oeste de la ciudad de Izumo, Shimane, y se movía rumbo al noroeste a 35 kilómetros por hora, con una presión central de 975 hectopascales.
A medida que avance por el archipiélago, Nanmadol continuará debilitándose hasta convertirse en un ciclón extra tropical en la tarde de este martes, pronosticó el organismo.
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