“Con doble moral, el Departamento de Estado de EEUU expresa su «solidaridad» con las víctimas de las masacres y violaciones de DDHH autorizadas con el DS 4078, mejor conocido como Decreto de la Muerte del gobierno de facto que financió, apoyó y defendió”, escribió el exmandatario en su cuenta de Twitter.
Añade en otro mensaje el líder del Movimiento al Socialismo-Instrumento Político por la Soberanía de los Pueblos que ese reporte al Congreso norteamericano repite las mentiras del secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, sobre supuestas irregularidades en los comicios de 2019.
Tal conclusión sirvió como justificación al golpe de Estado del 10 de noviembre de 2019 y abrió las puertas del poder al régimen presidido por Jeanine Áñez, el cual derivó en diversos actos de corrupción y el asesinato de 37 personas en las masacres de Sacaba y Senkata.
“Seguramente, pronto dirán que Arturo Murillo, el cómplice del senador @MarcoRubioCuba es inocente”, agrega Morales en esa red social en referencia al exministro de Gobierno de Áñez.
Murillo se encuentra preso en Estados Unidos y reconoció su culpabilidad por las ilícitas cometidas desde la cartera que encabezaba en la compra de medios para reprimir a quienes protestaban contra la ruptura del orden constitucional.
El primer expresidente indígena del país altiplánico sostiene en otro tuit que “no nos sorprende este nuevo ataque de EE.UU. Nos preocuparía que el país que financió magnicidios, golpes de Estado, invasiones y delitos de lesa humanidad nos apoye. Somos libres, dignos y soberanos. ¡La lucha sigue!”.
Las conclusiones del Departamento de Estado salieron a la luz 24 horas antes de un cabildo convocado para este viernes en Santa Cruz por el gobernador de ese departamento, Luis Fernando Camacho, con la amenaza de paros y acciones de protesta si el Censo de Población y Vivienda planificado para 2024 no se realiza en 2023.
Tras otra convocatoria deliberativa de ese tipo, Camacho lideró en los meses de octubre y noviembre de 2019 las revueltas que desembocaron en el derrocamiento de Morales.
La información presentada al Congreso norteamericano por el Departamento de Estado contradice las conclusiones de investigaciones realizadas por expertos independientes, quienes concluyeron que Almagro mintió y actuó a favor de los golpistas.
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