“Yo le pediría al señor Castillo que renuncie de una vez por el bien del Perú”, sostuvo al reiterar sus acusaciones de corrupción contra el mandatario, a quien atribuyó los problemas económicos de la población.
Ante la pregunta insistente de un reportero sobre si realmente no hablará con el presidente, el político de extrema derecha respondió, sin explicarse, que es “imposible electoralmente” que dialogue con Castilllo.
Dirigiéndose al mandatario, López Aliaga pidió que “de una vez renuncie, que se asile en un país para que no lo persigan” y planteó que después “haya un presidente de consenso”, al asegurar que no postulará a la presidencia en los siguientes comicios y propugnará una candidatura de consenso (de derecha).
Horas antes, el presidente Castillo saludó a gobernadores regionales y alcaldes elegidos ayer y anunció que los convocará a una reunión de coordinación y advirtió que los tres niveles de gobierno, nacional regional y municipal, deben trabajar juntos en favor de la población y contra la corrupción.
De otro lado, Castillo anunció que 2023 debe ser el año del relanzamiento y profundización de una verdadera descentralización y de la democracia, pese a que la mayoría parlamentaria opositora, alentada por la inminente proclamación de López Aliaga, prepara su vacancia (destitución).
Entretanto el congresista Guido Bellido, del Partido Perú Libre -que tuvo como candidato exitoso al actual presidente- adelantó uan autocrítica por la ausencia de logros en los comicios de ayer.
“El partido debe pasar por un cambio radical en su estructura y dirección luego de una crítica y autocrítica”, dijo el legislador, que hizo notar que más de 60 por ciento de los ganadores son movimientos regionales, por lo que ningún partido puede ufanarse de ser ganador de la jornada.
La exministra de la Mujer y analista Anahí Durand anotó que Lima tiene un alcalde de extrema derecha por el que no votaron mñas de 75 por ciento de los electores capitalinos, pues según el cómputo oficial por culminar, solo recogió 23,58 por ciento del total de votantes.
Sobre la beligerancia de López Aliaga contra el Gobierno y sus aspiraciones, Durand comentó que “todo indica que nuevamente la ciudad y sus problemas quedaran en segundo plano”.
Manifestó también que “el gran desafío del progresismo y las izquierdas sigue siendo lograr la representación del mundo popular; no hay muchos avances pero la tarea sigue abierta”, acotó.
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