En un mensaje de vídeo con motivo de una cumbre informal de la UE, el mandatario señaló que en la reunión se deciden cuestiones difíciles: si los países europeos tendrán gas y electricidad en los próximos meses.
Orban indicó que Hungría obtuvo anteriormente la exención del embargo al petróleo ruso, gracias a lo cual pudo garantizar que las nuevas restricciones no se aplicaran ni a la energía nuclear, ni al suministro de gas a su país.
Sin embargo, estas dispararon los precios de la energía, lo cual también afecta a Hungría, y son casi imposibles de pagar, aseveró.
En Praga, República Checa, transcurre durante la jornada una reunión informal de los líderes de la UE, en la cual discuten temas relacionados con el conflicto bélico en Ucrania, el aumento de los costos de la energía y sus ramificaciones económicas.
Anteriormente, Orban expuso que debido a las medidas antirrusas, «los habitantes de Europa se han vuelto más pobres».
Si se eliminaran las restricciones, entonces Europa podría evitar la recesión inminente, y los precios y la inflación caerían de inmediato, también enfatizó Orban.
Tras el inicio de la operación militar especial rusa para «desmilitarizar y «desnazificar» a Ucrania, varias naciones occidentales intensificaron medidas económicas contras Moscú y congelaron sus activos por valor de cientos de miles de millones de dólares.
Hasta la fecha, la Unión Europea adoptó ocho paquetes de sanciones contra La Federación de Rusia, las cuales, en primer lugar, afectaron a los propios países europeos, pues enfrentan una inflación máxima y una crisis energética.
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