Ello ocurre en momentos que los inversores se animan con informes de que China podría relajar sus normas contra la Covid-19, lo que impulsa a las principales divisas frente al dólar y provoca una subida del dos por ciento del petróleo.
El índice MSCI de acciones mundiales aumentó 0,3 por ciento para romper dos días consecutivos de pérdidas, pero todavía se dirige a una merma semanal de casi el tres por ciento, después de nuevos aumentos de tasas de gran magnitud de la Reserva Federal (Fed) y del Banco de Inglaterra.
Los valores sensibles a China, como las empresas mineras y los fabricantes de artículos de lujo, subieron en Europa, llevando al STOXX 600 a un máximo de siete semanas con un alza del uno por ciento.
Por su parte, los futuros de los índices estadounidenses crecieron del 0,6 al 0,8 por ciento, lo que sugiere un comienzo optimista en Wall Street, donde el S&P 500 se encamina a su mayor caída semanal desde finales de septiembre.
El crudo Brent de referencia europea aumentó dos por ciento, a 96,96 dólares el barril, mientras el crudo estadounidense WTI ganó 2,8 por ciento, a 90,63 dólares el barril. Con el dólar en retroceso, el oro creció 1,4 por ciento, a mil 652 dólares la onza.
mv/rfc