De acuerdo con el organismo, el objetivo de la medida es aumentar las visitas de vacacionistas extranjeros al país asiático también por esa vía marítima.
En tal sentido, se han realizado preparativos para aceptar barcos con grandes grupos de personas, quienes deberán cumplir determinadas pautas en aras de evitar la propagación del coronavirus SARS-CoV-2 entre los pasajeros.
EL MLIT concibió los procedimientos de bioseguridad con la anuencia del Comité Internacional de Cruceros y otras asociaciones de la industria.
Según el protocolo, las compañías de cruceros mantendrán una estrecha comunicación con las autoridades locales del puerto de escala antes de atracar e informarán sobre los casos sospechosos a bordo, los cuales deberán permanecer aislados desde el momento de su identificación.
Asimismo, todos los miembros de las tripulaciones necesitarán un esquema completo de vacunación de tres dosis contra el virus respiratorio, mientras que los pasajeros requerirán al menos de dos inyecciones.
“Crearemos un entorno en el que los operadores puedan disfrutar de los cruceros en Japón con tranquilidad al garantizar que cumplan con estas pautas”, expresó el titular del MLIT, Tetsuo Saito, en conferencia de prensa.
El ministro mencionó además que un primer barco de recreo zarpará del puerto de Yokohama el próximo mes y regresará en enero de 2023.
Por su parte, el Comité Internacional de Cruceros de Japón comunicó que se espera el arribo de unas 166 naves extranjeras a partir de marzo, reseñó la agencia Kyodo.
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