En un plantón de solidaridad con el pueblo colombiano frente a la sede del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto, en esta capital, representantes de esas agrupaciones entregaron una carta dirigida al jefe de la diplomacia tica, Rodolfo Solano.
‘Los colectivos y las organizaciones sociales que suscribimos la presente expresamos nuestra más profunda preocupación por los graves hechos de violencia policial que se vienen cometiendo hacia los manifestantes en Colombia durante las jornadas del Paro Nacional contra la Reforma Tributaria’, apunta la misiva.
Este hecho desató una represión violenta sobre la ciudadanía y una negación flagrante de las elementales garantías, en un Estado de Derecho, para el ejercicio de la movilización, la protesta y la participación ciudadana en los asuntos que los afectan, denuncia.
Por ello, indica, nos vemos en la necesidad de acudir a todas las instituciones de la comunidad internacional, en este caso, a la Cancillería de Costa Rica, con el propósito de que se dirijan de manera urgente al Estado colombiano para que este adopte medidas de protección a la vida de los manifestantes.
Asimismo, prosigue, solicitamos su apoyo para que haga un llamado contundente al presidente Iván Duque y su bancada política, para que frene la militarización del país, respete el derecho constitucional a la protesta y a la libre expresión del pueblo colombiano y a que haga cumplir las medidas de garantías y libertades para la movilización ciudadana.
‘Como organizaciones sociales y de derechos humanos estamos convencidos de que su pronto pronunciamiento, respecto a los graves hechos que hemos descrito a lo largo de esta carta, es urgente y necesario ya que ello contribuiría a superar la crisis coyuntural de la actual violencia estatal’, subraya la misiva.
La carta está firmada por la Asociación de víctimas Ecos de Colombia-Migración y Refugio, el Comité de Solidaridad con las Víctimas de la Violencia en Colombia, y Colombia Humana–Nodo Costa Rica, y respaldada por más de 70 agrupaciones.
Los participantes en el plantón vistieron camisetas con los colores de la bandera colombiana y carteles condenando la represión policial y calificando de genocidas al presidente Iván Duque y al exmandatario Álvaro Uribe, a quienes señalan de ser responsables de la masacre del pueblo de esa nación suramericana.
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