En ese escenario, el fundador del Partido de los Trabajadores (PT) tendría 45,7 por ciento de las intenciones de voto y Bolsonaro 41.
Por su parte, el exministro de Salud Luiz Henrique Mandetta y el político Ciro Gomes también aparecen numéricamente por delante de Bolsonaro, pero están técnicamente empatados.
El margen de error de la investigación es de dos puntos porcentuales más o menos.
Una segunda ronda entre Lula y Bolsonaro sería la más probable, pues ambos tienen la mayor intención de voto para la primera.
De acuerdo con el sondeo, Bolsonaro aparece con 37 por ciento y Lula (33,2). Todos los demás candidatos figuran con un rendimiento pobre.
La encuesta de Atlas Político muestra asimismo que 57 por ciento de los brasileños desaprueba el Gobierno del exmilitar, frente al 40 que lo apoya.
En una visita de cinco días a Brasilia la pasada semana, Lula restituyó vínculos con fuerzas políticas.
‘Fue muy importante para mí personalmente. Creo que para el PT resulta muy significativo restablecer conversaciones con las fuerzas políticas de este país. Hace tiempo que no me reúno con los partidos políticos’, afirmó en un vídeo.
En el audiovisual junto a la presidenta del PT, Gleisi Hoffmann, el exdirigente obrero, que se reunió en esta capital con políticos de diferentes tendencias y embajadores, calificó su viaje de exitoso.
Durante sus diálogos abordó ‘la vacuna urgente para todos, la ayuda de emergencia de 600 reales (108 dólares mensuales), el crédito de emergencia para salvar a pequeñas y medianas empresas y una política de inversiones para generar puestos de trabajo’, comunicó la organización política.
También en los intercambios de opiniones Lula denunció la desastrosa política internacional del ejecutivo de Bolsonaro.
‘Nadie llama a Brasil para una reunión. Todo el mundo está preocupado por el desgobierno, la deforestación, la despreocupación del gobierno por la Covid-19, las vacunas y el cuidado de la gente’, señaló.
Para el exlíder sindical, las conversaciones con diplomáticos fueron sustanciales ‘porque estas personas saben que Brasil se convirtió en un protagonista internacional y fue tomado muy en serio’.
Analistas aseguran que Lula, quien recuperó sus derechos políticos tras ser abolidas sus condenas por la Corte Suprema de Justicia, empezó a dar los primeros pasos para construir un frente amplio de la izquierda con la finalidad de derrotar a Bolsonaro en las justas comiciales del próximo año.
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