Los miembros de la municipalidad también resolvieron que, de manera inmediata, se desmantelen los oleoductos y las operaciones existentes dentro de 20 años, según una declaración informativa.
Antes de la votación, el presidente del Concejo Municipal, Paul Krekorian, calificó la contravención como un «momento decisivo» para la acción climática.
“Parte del crecimiento económico de la ciudad se debió a la industria del petróleo y el gas a principios del siglo XX, pero el resultado de ese increíble crecimiento contaminó innumerables vecindarios”, dijo Krekorian.
Los angelinos, que viven cerca de las operaciones de producción de petróleo, llevan años planteando problemas de salud relacionados con la contaminación del aire.
La ciudad tiene 26 campos de petróleo y gas y más de cinco mil pozos, ubicados en casi todas las partes del territorio.
Por su parte, el concejal, Mike Bonin, reconoció a los grupos ambientalistas, activistas y ciudadanos preocupados por promover la resolución para prohibir las nuevas perforaciones.
California y otros estados promulgaron leyes para crear barreras entre las escuelas, los vecindarios y los pozos de petróleo, pero muchos expertos afirman que es una solución temporal.
Estados Unidos es la segunda nación por emisiones de CO2 en 2021 del ranking de países por emisiones, su extracción de petróleo contribuye al calentamiento global y a la contaminación del aire.
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