En un breve contacto con reporteros en el patio principal del Palacio de Gobierno, la también exministra del gobierno cesado pidió a los periodistas la misma tregua solicitada al Parlamento, pues está dedicada a organizar su gobierno y preparar sus primeras medidas.
Sobre el reclamo de manifestaciones populares, que continúan hoy, de nuevas elecciones generales, habida cuenta de desaprobación masiva al Congreso que vacó a Castillo, consideró respetable la demanda pero dijo que más adelante “se verán alternativas”.
Al asumir el cargo y pensando tal vez en casos de gobiernos efímeros previos, dijo que tiene el compromiso con el Parlamento de gobernar hasta 2026, cuando termina el mandato quinquenal de Castillo, destituido ayer por el Legislativo por anunciar la disolución del Congreso.
“Todavía no tenemos el nombre”, respondió sobre el nuevo primer ministro, mientras en círculos políticos se menciona como supuesto designado a Jorge Nieto, extitular de Defensa y de Cultura del gobierno de Pedro Pablo Kuczynski (2016-2018).
Las mismas fuentes consideran que ocupará un cargo en el nuevo gabinete ministerial Alberto Otárola, quien fue su abogado en un proceso parlamentario de inhabilitación contra Boluarte por hacer gestiones aministrativas para un club provinciano, acusación archivada dos días antes que asumiera la Presidencia.
Otárola fue durante cinco meses ministro de Defensa del gobierno nacionalista de Ollanta Humala .
La flamente presidenta fue preguntada también sobre la pendiente cumbre del bloque económico Alianza del Pacífico que estaba programada para el 14 de diciembre para que México entregue a Perú la presidencia del grupo que integran además Colombia y Chile, pero fue suspendida por la crisis.
Boluarte dijo que espera que el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, pueda venir al Perú, donde será recibido con mucho cariño, para la transferencia pendiente o, como ella no tiene vicepresidente y por ello no puede viajar al exterior, el acto se realice por teleconferencia.
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