Según la Unes, una Organización No Gubernamental (ONG) que lucha por la protección y conservación del medio ambiente en El Salvador y en el ámbito regional, el fenómeno es una realidad que enfrentan todos los países del mundo e impulsa la migración.
Los cambios de temperatura o abastecimiento de productos provoca que las personas migren en busca de nuevas fuentes de trabajo y mejor calidad de vida, algo que desde hace décadas enfrentan los salvadoreños.
La Unes señaló que los agricultores al tener bajas cosechas se ven la necesidad de migrar para buscar nuevos trabajos, además del impacto de género que afecta a las mujeres.
Asimismo, los ambientalistas recordaron que propusieron en 2016 una Ley de Cambio Climático que no fue retomada ni discutida por la Asamblea Legislativa, donde se propone entre otras cosas, que se diseñen políticas ambientales dirigidas a mujeres, las cuales se someten a mayor estrés y preocupación por la posible falta de alimentos para sus hijos y familia.
Luis González, miembro de la Unes, explicó que la crisis ambiental golpea sobre todo a mujeres, niñas y niños y señaló la falta de políticas públicas para atender la crisis que se está generando.
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