La alta demanda de los medicamentos se debe a la actual temporada de gripe, que suele ser entre octubre y mayo, pero este año llegó al menos seis semanas antes, como una enfermedad más grave.
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), se registra una confluencia de virus junto con la influenza, como el virus sincitial respiratorio (RSV) y el Covid-19, lo cual afecta mayormente a los menores de edad.
Las hospitalizaciones son altas en todos los grupos de edad, especialmente entre los adultos de 65 años o más y en los niños menores de cuatro años, destaca Ilan Shapiro, pediatra de AltaMed Health Services.
Esta «tripledemia» causa otro problema en las farmacias: una escasez de analgésicos para niños como el paracetamol y el ibuprofeno, refiere el galeno.
Ante la falta de medicamentos, las cadenas de farmacias limitaron la venta de estos productos, en tanto, la pasada semana el Gobierno del presidente, Joe Biden, puso a disposición de la población el antiviral Tamiflu, perteneciente a la Reserva Nacional, para poder responder al aumento de casos en el país.
“Estamos tomando medidas para que todas las jurisdicciones puedan satisfacer la mayor demanda de Tamiflu en el actual brote de gripe estacional”, dijo el secretario del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS), Xavier Becerra, en un comunicado.
La Administración para la Preparación y Respuesta Estratégicas del HHS trabajará con los estados para evaluar cualquier solicitud de Tamiflu a través de la Reserva Nacional Estratégica, indicó Becerra.
La influenza no fue un problema grave en los últimos dos años debido a las precauciones que la gente tomó contra la Covid-19, pero una gran mayoría del país se alejó de esas protecciones, y a medida que más personas ingresan en los meses más fríos, el virus va cobrando su precio, señala la entidad de salud.
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