La nueva regulación entrará en vigor el próximo 8 de mayo avalada por especialistas del Ministerio de Salud, Trabajo y Bienestar, quienes desde finales de 2022 debatían sobre la pertinencia de mantener las medidas intensivas contra la propagación del SARS-Cov-2.
“Según la opinión de los expertos, se necesitarán unos tres meses para una transición completa del sistema médico y los preparativos por parte de los gobiernos locales”, destacó el primer ministro, Fumio Kishida, durante una reunión en su residencia oficial.
En principio, la flexibilización implicaría eliminar las restricciones a la movilidad de las personas, incluso de aquellas infectadas o que hayan sido contacto directo de casos positivos al virus respiratorio.
Asimismo, se sumarían más instituciones médicas a la atención de pacientes con síntomas, un servicio limitado actualmente a hospitales especializados o designados para tal propósito.
Cabe destacar que en la Clase 5 los enfermos asumirán parte de los gastos médicos por hospitalización y exámenes que hasta ahora cubría en su totalidad el presupuesto público, mientras se mantendrá por un tiempo la gratuidad de las vacunas.
A menos que se presenten “circunstancias especiales”, la relajación de las medidas sanitarias también podría derivar en el levantamiento de requisitos fronterizos para los viajeros extranjeros como la presentación de un certificado de vacunación de tres dosis o una prueba PCR (reacción en cadena de la polimerasa) negativa.
La Ley de Control de Enfermedades Infecciosas de Japón clasifica los virus y bacterias en cinco categorías según el riesgo de agravamiento e infectividad, al mismo tiempo que estipula las acciones que pueden adoptar los gobiernos nacionales y locales en cada etapa.
Hasta la fecha, la Covid-19 figura en un nivel “similar” al dos, el cual agrupa otros padecimientos como la tuberculosis y el síndrome respiratorio agudo severo (SARS), reseñó la prensa nacional.
mem/lcp