Por María Julia Mayoral
Corresponsal jefa en Angola
El ministro del sector, Mário Oliveira, realizó el 10 de febrero la apertura comercial de las capacidades del equipo, cuya construcción corrió a cargo de la empresa rusa «Information Satellite Systems Reshetnev».
Tras su lanzamiento al espacio el 12 de octubre de 2022, el vehículo espacial quedó ubicado en la órbita geoestacionaria 23E, a unos 36 mil kilómetros de la Tierra, en noviembre del propio año y las partes avalaron su cabal funcionamiento.
Según afirmó Oliveira, la estrategia de comercialización apunta al ofrecimiento de precios competitivos y las oportunidades de ganar mercado en zonas totalmente desconectadas o con baja penetración digital.
Un estudio de la Unión Internacional de Telecomunicaciones y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura estimó en 2022 que un tercio de la población del África subsahariana seguía sin acceso a las señales de banda ancha móvil y apenas un 28 por ciento podía usar Internet.
La cobertura del Angosat-2, confirmó el ministro angoleño, contempla al sur de Europa y a todo el continente africano, en especial, al área de la Comunidad de Desarrollo de África Austral (SADC), compuesta por 16 Estados.
Hacia la región de la SADC, el satélite tiene apuntados 24 haces en banda KU y cinco transpondedores en banda C, argumentó el titular de Telecomunicaciones, Tecnologías de la Información y Comunicación Social.
En el plano interno, acotó, los operadores y el Gobierno podrán usar capacidades de ancho de banda con costos basados en moneda nacional (kwanza), lo que les ayudará a mejorar la gestión de sus inversiones y ajustarlas a la realidad del usuario final.
El Angosat-2 estará en función de las telecomunicaciones, los órganos de seguridad y defensa, la agricultura, los recursos minerales, la preservación de la naturaleza y el medio ambiente, la medicina y el enfrentamiento a las adversidades climáticas, expuso el Ejecutivo.
Al decir de Oliveira, podrá contribuir a la alfabetización digital de la población y a la creación de nuevas oportunidades de empleo, principalmente para los jóvenes, en áreas relacionadas con la tecnología espacial, entre ellas, el mantenimiento y la instalación de sistemas VSAT.
El director general de la Oficina de Gestión del Programa Espacial Nacional, Zolana João, precisó que el satélite prestará servicios en las bandas C, KU y KA, con precios razonables a partir del análisis de las tarifas existentes a escala continental.
MERCADOS SATELITALES ESPECIALMENTE ATRACTIVOS
En opinión del ingeniero, los mercados satelitales resultan especialmente atractivos en esta parte del planeta, dado el déficit de conectividad digital, las demandas socioeconómicas y los pronósticos sobre el crecimiento demográfico.
Desde hace varios años, los números muestran que en África se invierten miles de millones de dólares, pero “sigue siendo el continente menos conectado del mundo”, razonó.
La directora adjunta de la Oficina, Vânia Pereira, corroboró el interés de aprovechar las valencias de los operadores con mayor soporte para llevar los servicios a otros países, porque pueden convertirse automáticamente en enlaces de conectividad, utilizando infraestructuras como los cables de fibra óptica.
A juicio de la especialista, la comercialización del Angosat-2 también puede ayudar al establecimiento de pequeños negocios, entre ellos, los “cibers” en zonas rurales e intrincadas.
Angola es, por su extensión territorial, el séptimo país más grande de África y todavía tiene áreas con poca o ninguna cobertura por las redes de telecomunicaciones; por tanto, los servicios satelitales son una importante alternativa, sintetizó el ministro Oliveira.
Desde la óptica empresarial, el directivo de Angola Telecom, Adilson Santos, celebró el esquema de costos: “Hemos tenido muchas dificultades para adquirir divisas. Con el satélite esperamos pagar todo en kwanzas”, comentó.
Mientras el jefe comercial de Angola Cables, Rui Faria, opinó que el Angosat-2 potenciará la salida al mercado internacional, pues permitirá aminorar la dependencia a cables submarinos y redes terrestres.
Con el satélite, abundó, sería posible complementar la cobertura en regiones remotas de varios países, a saber, Nigeria, Congo, Uganda, Mozambique, Kenya y República Democrática del Congo, donde opera Angola Cables.
El Ejecutivo pretende transformar a Angola en “hub” de telecomunicaciones por la cobertura geográfica del satélite y las conexiones disponibles mediante cables marítimos internacionales y fibra óptica terrestre de enlace con naciones vecinas, dijo Oliveira.
A fines de enero, el presidente João Lourenço inauguró en la provincia de Luanda el Centro de Control y Misión de Satélites, con capacidad para manejar hasta tres equipos orbitales de manera simultánea.
Ubicado en la zona de Funda, el complejo servirá a los fines de mejorar las telecomunicaciones, en general, y las transmisiones de voz e imágenes de los medios de comunicación social, respondió el mandatario a la prensa.
El Angosat-2 y su centro de control terrestre significan para Angola el inicio de una nueva era en el campo de las tecnologías de la información y eso impactará de manera directa en la vida de los ciudadanos, resumió.
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