Bota fue interceptada por las fuerzas de ocupación cuando trataba de entrar en la ciudad de El Aaiún, capital de la República Árabe Saharaui Democrática controlada por las fuerzas de Rabat.
Miembro de la ONG Una Finestra al Món Una (ventana al Mundo, en catalán), Bota declaró que su intención era conocer en el terreno a través de mujeres saharauis sus historias de lucha y cómo es la vida cotidiana bajo la represión de los ocupantes.
La ONG denunció la expulsión de una de las miembros del proyecto y «la impunidad con la que Marruecos actúa contra activistas y defensoras de los derechos humanos».
Añade al respecto que la expulsión fue otra muestra una muestra del bloqueo que hay para saber qué pasa realmente en el Sáhara Occidental.
Asimismo denuncia los obstáculos «para que defensoras de derechos humanos y observadores internacionales documenten las violaciones de los derechos de la población saharaui de los territorios ocupados del Sáhara Occidental”, añade la organización.
mem/msl