La medida fue adoptada tras diversas denuncias de cambios sospechosos de fiscales que investigaban a una red de corrupción judicial conocida como “Cuellos blancos”.
La JNJ respondió en un comunicado que recuerda sus atribuciones de investigar a jueces y fiscales, expresa inquietud por las afirmaciones de Benavides y señala que la pesquisa abierta permitirá establecer si existe mérito para iniciar un procedimiento disciplinario.
En un video, Benavides alegó con vehemencia que la decisión es “un acto ilegal y arbitrario” basado en el supuesto de que los cambios en el equipo especial de fiscales “Cuellos blancos” se debería “a presuntas comunicaciones telefónicas de mi persona”.
Versiones difundidas en Internet han señalado que Benavides sería una de los fiscales y jueces que figuran entre las miles de grabaciones de comunicaciones telefónicas del ex juez supremo César Hinostroza, señalado como cabecilla de la red corrupta y prófugo.
La investigación, sostuvo, “constituye la consumación de los ataques iniciados desde que tomé la decisión de investigar al poder político”, alusión a que abrió una serie de investigaciones al entonces presidente Pedro Castillo, por lo que es apoyada por la mayoría parlamentaria derechista.
Relacionó la indagación con “los riesgos valorados por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos que me otorgó la medida cautelar para garantizar mi función como fiscal de la Nación”.
Insinuó que puede obedecer “a los resultados que va obteniendo el equipo especial Cuellos Blancos en que los próximos meses concluirá con la transcripción de los audios de contenido penal”.
También dijo que no quiere pensar que se le investiga por pedir una nueva prisión preventiva para el expresidente Castillo por presunta corrupción o a que investiga a altos funcionarios del actual gobierno por violación a los derechos humanos y corrupción.
En la víspera, el conocido periodista Cesar Hildebrandt comentó que “el Ministerio Público es cómplice del gobierno. Patricia Benavides está jugando en pared (coordinando) con la presidenta Dina Boluarte”.
“Hizo muy bien su trabajo con Castillo, lo acosó, lo empapeló (le abrió decenas de indagaciones), lo arrinconó”, agregó y sostuvo que “la fiscal de la Nación es una militante política de este gobierno”.
Benavides ha sido criticada también por cambiar al fiscal que investigaba a una de sus hermanas, Emma, por integrar un tribunal que dejó libre a un peligroso narcotraficante, y el nuevo fiscal hizo lo contrario que el reemplazado, al pedir su absolución.
En los últimos días circuló en Internet un recorte periodístico de la ciudad centroandina de Huancavelica, de 1996, según el cual Benavides fue acusada de ayudar a fugar a su madre Emma Vargas, entonces alcaldesa de Huancavelica, al alertarla de una inminente orden de su captura por cargos de concusión y peculado.
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