De acuerdo con un comunicado de la entidad, según el modelo hidráulico actualizado y el muestreo más reciente, el líquido proveniente de la planta de Baxter seguirá siendo segura para su consumo al menos hasta las 11:59, hora local, de este lunes.
La alerta se produce después que en el condado de Bucks, el pasado viernes por la noche, una tubería estalló en la planta química Trinseo, lo que provocó un derrame químico de más de ocho mil galones de solución de polímero acrílico soluble en agua en Otter Creek, un afluente del río Delaware, informó NBC Filadelfia.
El río Delaware, que separa las ciudades de Filadelfia y Nueva Jersey, alimenta la planta de tratamiento de agua potable Baxter de la ciudad.
Los productos químicos de preocupación incluyen acrilato de butilo y acrilato de etilo, ambos utilizados para fabricar resinas, plásticos y adhesivos, explicaron funcionarios de la urbe.
El acrilato de butilo también estaba a bordo del tren de carga que se descarriló el mes pasado en East Palestine, Ohio.
Michael Carroll, subdirector gerente de Transporte, Infraestructura y Sostenibilidad de Filadelfia, dijo a los periodistas el fin de semana que esta sustancia química en particular puede acarrear algunos efectos conocidos sobre la salud.
El proveedor de agua potable Aqua Pennsylvania reveló en un comunicado que “cerró la entrada al sistema de agua de Bristol tan pronto se supo del derrame químico, evitando la exposición del cliente a materiales peligrosos”.
La compañía declaró que está trabajando con agencias estatales y federales para monitorear la situación y reabrirá la toma de agua solo cuando “cumpla con los estrictos estándares de calidad”.
La causa exacta del derrame está aún bajo investigación.
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