Comprometido con la causa en contra de la discriminación racial, Belafonte compartió con su amigo Martin Luther King Jr. la lucha por los derechos civiles en Estados Unidos a principios de los años 60 del sigo pasado.
Y junto a otras personalidades del ámbito musical, utilizó su voz para exigir el fin de la hambruna a través del éxito We Are The World.
Como activista político, en los años 60 hizo campaña con King Jr., y en los 80 trabajó para acabar con el apartheid en Sudáfrica y coordinó la primera visita de Nelson Mandela a Estados Unidos.
Trabajó a favor de los derechos de los niños africanos como embajador de Unicef desde 1987, y en 2014 le fue otorgado el Premio Humanitario Jean Hersholt.
El artista estadounidense fue la primera persona de raza negra a la que se le permitió actuar en muchos locales nocturnos. Desde su posición, logró avances raciales en el cine en una época de mucha discriminación en gran parte de Estados Unidos.
El tercer álbum de artista, Calypso, se convirtió en el primero de un intérprete en solitario en vender más de un millón de copias. Banana Boat, un tema sobre los estibadores caribeños con su sonoro Day O, le convirtió en una estrella internacional.
Ganó premios Grammy en 1960 y 1965 y recibió uno especial a toda una carrera en el año 2000.
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