Lanchipa lamentó que “son décadas” de violaciones a niños y adolescentes en las que no se brindó la protección necesaria a la víctimas y tampoco se hizo la denuncia pública.
El Ministerio Público informó que ya recibió formalmente ocho denuncias por abuso sexual en los departamentos de La Paz, Cochabamba, Tarija y Santa Cruz, pero dijo que esas acusaciones involucran solo a curas fallecidos y octogenarios.
Precisó el Fiscal General que entre los acusados figuran Alfonso Pedrajas, Luis María Roma Pedrosa, Antonio Gausset (“Tuco”), Alejandro Mestre y otros sacerdotes.
Como parte de las investigaciones, la Fiscalía General de Bolivia solicitó a su par de España la revisión del proceso en ese país, y mediante la cooperación internacional, pidió al periódico español El País que haga llegar una versión digital del diario personal del pederasta “Pica” Pedrajas.
En ese volumen, el cura aberrado confesó al menos 85 delitos de abusos sexuales contra menores, la mayoría en Bolivia..
Respecto a este tema, el procurador general del Estado Plurinacional, Wilfredo Chávez, cifró en 200 el número de abusos sexuales cometidos por curas en Bolivia.
Chávez recordó que ya se inició una denuncia penal por el caso, que ahora radica en el distrito judicial de Cochabamba, y que se desarrolla en un ambiente de reserva.
“El Estado debe dar muestras de solidez y sobriedad, que es lo correcto, para aclarar y sancionar los hechos”, sostuvo.
Pedrajas, jesuita español que abusó de al menos 85 niños en Bolivia, es la parte visible de un témpano de pederastia investigado ahora por los poderes Ejecutivo, Judicial y Legislativo de Bolivia.
El periodista Julio Núñez, de El País, reconstruyó su historia con testimonios de víctimas y allegados, y su investigación, en portada el domingo 30 de abril, destapó el escándalo bajo el título Diario de un cura pederasta: “Hice daño a demasiados”.
Tal denuncia conmociona al mundo porque por primera vez se muestra la mirada de los abusos y su encubrimiento por la Iglesia Católica, desde el testimonio del religioso agresor.
Pedrajas falleció en 2009, pero dejó constancia por escrito de los crímenes sexuales contra decenas de niños y adolescentes en Bolivia, en un diario que recorre su vida desde 1960, cuando se hizo novicio, hasta 2008, año en el que ya enfermo dejó de escribir.
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