El director de la institución, Raúl Molina, explicó que más de medio millar de piezas, de gran valor artístico, pertenecen a diferentes etnias de ese continente y fueron elaboradas entre los siglos XVI y XX.
Molina destacó que este patrimonio de la entidad cultural, que celebró en mayo su aniversario 23, obedece a donaciones del destacado pintor matancero Lorenzo Padilla, quien durante muchos años vivió en París, Francia, y retornó en fecha reciente a su natal ciudad de Matanzas.
‘La exposición africana posibilita conocer la historia cultural, desde períodos antiguos, de estos pueblos’, destacó Molina. Ubicada en el centro histórico de esta tricentenaria y occidental cabecera provincial homónima, la vivienda original del actual Museo fue construida de estilo ecléctico en la segunda mitad del siglo XIX. Dispone de sala de arte universal y cubano, dos de arte tradicional africano y sendas saletas con muestras transitorias, mientras el patio está dedicado a actividades culturales.
En la instalación se inscriben obras relevantes del legado universal y cubano elaboradas por Wilfredo Lam, Fidelio Ponce, Esteban Chartrand, Esteban Valderrama, Alberto Tarascó, Francisco Coro Marrodán, Angel Acosta León, y del propio Padilla, añadió Molina.
Además, el centro cuenta en sus fondos con xilografías, pinturas, esculturas, dibujos, y artesanías como parte del patrimonio de esta ciudad nombrada la Atenas de Cuba.
Tras la salida permanente al exterior de su última dueña a inicios de la década de 1990, la mansión, por su estética y estructura, fue rescatada en 1998 para la función de Museo de Arte de Matanzas.
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