Los abogados de la Administración de Drogas y Alimentos (FDA por sus siglas en inglés), y el fabricante del fármaco, intentarán persuadir a un panel de tres jueces del Tribunal de Apelaciones del Quinto Circuito en Nueva Orleans para que no reduzca el acceso a la mifepristona.
“Los estadounidenses han usado el medicamento de forma segura durante más de dos décadas. Más de cinco millones de mujeres en el país lo han usado para interrumpir sus embarazos, al igual que en todo el mundo. Y estudio tras estudio se demuestra que los eventos adversos graves son extremadamente raros”, alega la defensa de la FDA, citada por la cadena de noticias NBC News.
En tanto, la contraparte, compuesta por un grupo de médicos y profesionales del sector que se oponen al aborto, argumentan que la aprobación de la píldora por parte de esa entidad en 2000 fue “arbitraria y caprichosa” y debería ser revocada. Del lado de este grupo se puso el mes pasado en Texas el juez federal de distrito Matthew Kacsmaryk, quien suspendió la aprobación de la mifepristona por parte de la FDA, ocurrida en 2000.
El magistrado, designado por Donald Trump (2017-2021), citó lo que llamó “evidencia que indica que el organismo enfrentó una presión política significativa” para autorizar el medicamento hace más de dos décadas. Luego de esto, el Departamento de Justicia, que representa a la FDA, presentó una apelación de emergencia de la orden de Kacsmaryk ante el Quinto Circuito.
Refirió entonces que el fallo “trastornó décadas de dependencia al bloquear la aprobación de la mifepristona y privar a los pacientes del acceso a este tratamiento seguro y efectivo, con base en la propia evaluación equivocada de la corte sobre la seguridad de la droga”.
El Tribunal Supremo intervino el 21 de abril y manifestó que el statu quo debería permanecer hasta tanto se desarrollara el proceso de apelación en el Quinto Circuito, y mantuvo vigente el acceso a la píldora abortiva.
La mifepristona todavía está disponible en los 37 estados donde se permite alguna forma de aborto con medicamentos, sin embargo, los desafíos judiciales en relación a su empleo acontecen después del fallo de la Corte Suprema que el año pasado revocó la protecciones federales del derecho a la interrupción voluntaria del embarazo.
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