La insólita “extradición temporal”, según el coronel Carlos López, jefe de la sección peruana de la Policía Internacional (Interpol), se hizo efectiva tras el compromiso norteamericano de devolver al criminal a Perú una vez que sea juzgado en el país del norte.
Según el acuerdo, aprobado por la Corte Suprema, Van Der Sloot, de ser condenado en Estados Unidos, será nuevamente entregado al término de su carcelería en Perú, para que cumpla la pena que le hubiera sido aplicada allí.
El criminal fue trasladado con un fuerte despliegue de seguridad a la base aérea contigua al aeropuerto internacional Jorge Chávez, donde fue entregado a agentes del FBI con quienes viajó en un vuelo especial a Estados Unidos.
Previamente, Van Der Sloot fue traído a Lima desde la región de Tacna, donde cumplía su condena en el presidio de Challapalca, a cinco mil metros de altitud y destinado a presos de alta peligrosidad.
El neerlandés fue sentenciado por el asesinato de una joven peruana, cometido para robarle el dinero que le había ganado en un juego de cartas, tras lo cual se fugó a Chile, cuya policía lo entregó a Perú en forma sumaria.
En Estados Unidos será juzgado por extorsionar a los padres de una joven desaparecida, por cuyo presunto asesinato fue juzgado pero salió indemne, porque el cadáver nunca apareció.
Van Der Sloot extorsionaba a los padres de la desaparecida al pedirles dinero a cambio de decirles donde estaba el cadáver, lo que nunca cumplió.
jha/mrs
