En declaraciones a la prensa, el dirigente de la Federación Panameña de Béisbol Aníbal Reluz expresó que la decisión será una gran oportunidad para jugadores y técnicos, por lo que su éxito dependerá de cómo se maneje el asunto.
Al respecto, el expelotero profesional Damaso Espino manifestó que primero podrían realizarse diversos eventos de la Liga Mayor de Béisbol (MLB) en Panamá, donde los equipos vendrían a la academia para ver a los atletas, lo cual motivaría a los equipos de la Gran Carpa a establecerse en el país.
Por su parte, el diputado Benicio Robinson, proponente del proyecto, expresó a los periodistas que este es el primer paso para traer las academias de los equipos de grandes ligas de béisbol, a las cuales pueden unirse otras en el futuro de disciplinas con gran arraigo popular como el fútbol.
Robinson, también presidente de la Federación de Béisbol de Panamá, aseguró en su cuenta de Twitter que con el establecimiento de estos centros, con experiencia y trayectoria en el reclutamiento de talentos y generación de deportistas, los jóvenes contarán con una formación integral.
La víspera el presidente Laurentino Cortizo rubricó la Ley 594 en el capitalino estadio Rod Carew, el cual lleva el nombre de una de las grandes glorias del deporte panameño, en especial de la pelota.
La iniciativa también permitirá crear un plan de desarrollo para las categorías menores de béisbol y otorgar incentivos fiscales a empresas y organizaciones nacionales e internacionales que inviertan en este deporte y realicen contribuciones o donaciones al Patronato, las cuales serán deducibles del pago del impuesto sobre la renta.
‘Uno de los objetivos principales de la ley es fomentar e incentivar la disciplina del béisbol en los niños y adolescentes entre 9 y 18 años de edad’, aseveró Cortizo, quien afirmó que la propuesta ayudará a la formación de los atletas y a la creación de nuevas oportunidades para la juventud.
Según el director del Instituto Panameño de Deportes, Héctor Brands, a pesar de los momentos difíciles que enfrenta el país, ‘el deporte sigue siendo una herramienta de transformación social’.
A juicio de algunos expertos, el establecimiento de estos centros permitirá que beisbolistas de Venezuela, Brasil, Colombia y Nicaragua, entre otras naciones, puedan formarse en la nación istmeña.
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