Según el Ministerio de Cultura y Turismo, la entrada del carnaval de Oruro, del 6 al 16 de febrero de cada año, es la que más aporta con 35 millones de dólares, seguido de Santa Cruz (10 millones) y Cochabamba (cinco millones), sólo en las actividades centrales.
Las festividades en territorio cochabambino comienzan en febrero y concluyen a mediados de marzo, consideradas como una de las más largas en el país suramericano.
El Centro Boliviano de Estudios Económicos, de la Cámara de Industria y Comercio, alertó que entre los empleos más afectados están el transporte, restaurantes, hoteles, músicos, artesanos bordadores, entre otros.
Según el expresidente de la Cámara Hotelera de Cochabamba, Fidel Huanca, el carnaval es la época más alta para el sector porque llegaban delegaciones enteras de fraternidades y turistas que se alojan en diferentes instalaciones.
El Corso de Corsos (desfile) era la mayor fuente de ingresos en ese territorio con un estimado de 15 millones de dólares, actividad que atraía aproximadamente a 30 mil visitantes y hasta 60 mil bailarines, revelaron cifras de la Gobernación.
Por otra parte, la cartera de Estado preció que este año Oruro tendrá pérdidas por más de 18 millones de dólares por concepto de gastos generados por turistas nacionales y extranjeros.
La Asociación Cruceña de Comparsas Carnavaleras decidió realizar algunas presentaciones de forma virtual, a transmitirse por las redes sociales y la televisión, con el objetivo de recaudar donaciones para los enfermos de la Covid-19.
Bolivia registró 696 nuevos contagios en las últimas 24 horas, para un acumulado de 236 mil 732 casos confirmados, mientras que los pacientes recuperados ascienden a 177 mil 775 y los decesos a 11 mil 202 desde el inicio de la pandemia en marzo pasado, según el Ministerio de Salud.
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