El comandante general de la Segunda Región del Ejército, general Carlos Rincón, calificó además como anómalo el insólito castigo inferido a los adolescentes, aplicado en plena noche invernal y documentado en una foto difundida en Internet.
Sostuvo que en la secundaria, que lleva el nombre de un héroe de Cuba y de Perú, y en el Ejército en general se respetan los derechos humanos.
Rincón no se refirió al pedido público del ministro de Defensa, Jorge Chávez, quien al condenar el maltrato pidió el relevo del director del colegio, coronel Nerio Gálvez. El oficial dijo que las medidas que correspondan se aplicarán al término de la indagación.
Señaló que personalmente dio durante el día toda la información disponibles a representantes del Congreso (parlamento), la Fiscalía y la Defensoría del Pueblo, que han abierto también sendas pesquisas sobre el caso.
Lo sucedido hizo recordar a los peruanos los abusos y humillaciones que vivían los alumnos del Colegio Leoncio Prado en la década de 1950, documentados en la novela “La Ciudad y los Perros”, del escritor Mario Vargas Llosa.
En la obra, el autor relata en tono de ficción lo que vivió como alumno de la escuela, como una repesentyación en pequeña escala de la quebrada e injusta sociedad peruana.
Sin embargo, parte del tránsito de Vargas Llosa del progresismo a la derecha extrema incluyó una valoraciòn distinta a su paso por la secundaria, pues con el pasar de los años terminó diciendo que había sido una experiencia positiva.
“Sería injusto decir que fui infeliz en mi paso por Leoncio Prado. Tenía el colegio sus compensaciones. El internado me daba muchas horas para leer”, dijo el novelista a fines de 2012.
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