«Importamos casi todo el maíz de los Estados Unidos y de Canadá. Si yo quisiera reemplazar ese maíz por maíz colombiano sembrado tendría 1,2 millones puestos de trabajo más, es decir, riqueza», explicó.
Sin embargo, el acuerdo prohíbe, por ejemplo, la siembra de variedades nativas del maíz, aseguró el gobernante en un encuentro con productores cafeteros.
«Y quiero anunciar públicamente que comienza su renegociación», enfatizó el gobernante, quien fue ovacionado por los trabajadores del campo reunidos en el municipio de Pitalito, municipio localizado en el sur oriente del departamento de Huila.
El Acuerdo de Promociones Comerciales entre Estados Unidos y Colombia es un TLC aprobado el 12 de octubre de 2011 por el Congreso de los Estados Unidos y en vigencia desde el 15 de mayo de 2012.
Sus detractores señalan que es perjudicial para la economía nacional, principalmente porque afecta los sectores agropecuarios y el de la salud pública, porque los monopolios farmacéuticos norteamericanos «lograron subir los estándares de protección de su sector, por encima de los parámetros de la OMC».
También daña el sector industrial, por la entrada de productos remanufacturados que compiten con los nacionales a muy bajos costos.
Durante su campaña presidencial, Petro propuso renegociar el TLC para proteger a la agricultura nacional de los productos estadounidenses que llegan a precios muy bajos.
Según un análisis del comercio exterior entre ambos países en los últimos 10 años, presentado en 2022, el resultado tiene «un sabor agridulce», advirtió el portal Más Colombia.
Explica que, si bien avanzaron las exportaciones de bienes no minero energéticos, las exportaciones se redujeron prácticamente a la mitad (tanto en valor como en toneladas).
En 2012, Colombia exportó a este país 27,9 millones de toneladas de mercancías, mientras que en 2021 fue de 12,9 millones, lo cual representó una caída del 53 por ciento, detalló.
Con respecto al valor FOB (precio de venta de los bienes embarcados a otros países puestos en el medio de transporte, sin incluir valor de seguro y fletes), los datos muestran que por estas mercancías Colombia pasó de recibir 21 mil 833 millones de dólares en 2012, a 10 mil 959 millones de dólares.
Este monto significa una reducción del 49,8 por ciento, puntualizó Más Colombia.
La balanza comercial entre ambos países resulta cada vez más deficitaria y el país ha perdido terreno en la producción manufacturera, añadió.
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