«En el campo de entrenamiento cerca de Osipóvichi se imparten clases a los militares de una brigada de misiles sobre el control de tiro, y se hace hincapié en la cohesión de las tripulaciones”, según destacó la agencia de noticias BelTA.
En el entrenamiento participan una unidad de tropas de misiles de las fuerzas armadas equipadas con el sistema táctico-operativo Iskander-M y una unidad con el sistema de misiles tácticos Tochka.
En el transcurso de los ejercicios, las tropas de misiles practican las cuestiones de la preparación y ejecución de operaciones de combate, así como el cumplimiento de las tareas de entrenamiento en el lanzamiento de misiles, tanto en equipos convencionales como especiales.
El 25 de marzo, el presidente de Rusia, Vladimir Putin, anunció que Moscú desplegaría armas nucleares tácticas en Belarús a petición de Minsk, al igual que Washington lleva tiempo haciendo en el territorio de sus aliados.
Moscú ya entregó a Minsk el sistema de misiles Iskander, que puede transportar ojivas nucleares, y ayudó a reequipar los aviones para que puedan utilizar municiones especiales.
Las tropas de misiles y los pilotos belarusos completaron un curso de formación en el territorio ruso. El 16 de junio, Putin reveló que Rusia ya había enviado las primeras ojivas nucleares, y que el lote completo llegaría a finales de año.
A su vez, el 23 de junio, Lukashenko declaró que una parte importante de la munición prevista ya se encontraba en su país.
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