“Nosotros no podemos descartar que haya existido algún favorecimiento de algunos policías, fiscales e incluso algunos jueces porque hemos encontrado bastantes trabas dentro de este proceso”, aseguró el titular en una extensa conferencia de prensa.
Ante esa situación, se decidió crear un equipo de contrainteligencia, integrado por civiles y policías, quienes ahora investigan esas “muchas y constantes trabas”, así como los presuntos involucrados, expresó.
“No descartamos que este sujeto (Marset) no solamente hubiera recibido apoyo en el departamento de Santa Cruz por el grupo social de esta persona”, añadió del Castillo.
Reiteró la probabilidad de que, existan o hubiesen existido, “policías que hubieran ayudado a facilitar la fuga. Hay grupos de contrainteligencia dentro de la Policía que están investigando a policías”, insistió.
El funcionario lamentó que los requerimientos para allanamientos y otros demoraron hasta 72 horas, cuando la agilidad procesal era necesaria, de acuerdo con el poder de movilizarse del narco uruguayo, de quien dijo controla hasta 800 millones de dólares y se movió en un territorio muy extenso y con baja densidad de población como ocurre en el oriente cruceño y el Beni.
Del Castillo dijo, sin embargo, que, pese a las “trabas”, se seguirá trabajando hasta capturar a Marset.
“Nosotros no vamos a perder nuestro principal objetivo que es conseguir la captura o lograr identificar el lugar exacto donde se encuentra este sujeto y su entorno familiar”, sostuvo enfático.
Durante la conferencia de prensa fue presentado el Mapa del Narcotráfico en Bolivia, que certifica el lugar exacto de la zona en que se encuentra el mayor número de narcolaboratorios y fábricas en el país altiplánico.
De 32 años de edad, el uruguayo Marset es procurado en toda Bolivia por más de dos mil policías, y su captura es el principal objetivo de los efectivos movilizados en la operación León 23.
El narcotraficante prófugo es considerado un “pez gordo” en ese tipo de ilícitas por su “alta peligrosidad”.
Permanece prófugo desde el 29 de julio del año en curso, tras escapar de un mega operativo policial en Santa Cruz.
Sin embargo, las fuerzas policiales de Bolivia ya provocaron al clan criminal de Marset pérdidas valoradas en cerca de 25 millones de dólares, e involucraron en su búsqueda a fuerzas de otros países de Sudamérica.
mgt/jpm