El Ministerio de Justicia y Seguridad Pública informó la víspera que recibió esas representaciones y las remitió a la PF, que investiga el caso y analizará las grabaciones.
Tales impresiones audiovisuales fueron enviadas por las autoridades italianas y aceptadas por la Secretaría Nacional de Justicia, responsable de las solicitudes de cooperación jurídica internacional.
La indagación es conducida por el ministro Antonio Días Toffoli, del Supremo Tribunal Federal (STF). La defensa de los acusados también solicitó acceso a las imágenes.
De acuerdo con medios periodísticos, Andreia Mantovani, mujer del empresario Robero Mantovani, se aproximó en julio pasado a De Moraes en el aeropuerto internacional Fiumicino, en Roma, Italia, cuando este venía de impartir una conferencia en el Foro de Derecho Internacional de la Universidad de Siena.
La mujer, partidaria confesa del expresidente Jair Bolsonaro, hostilizó al ministro debido a su actuación en cuestiones contrarias relacionados con el político ultraderechista.
Teniendo en cuenta lo publicado, afrontó al juez bajo gritos de «bandido, comunista y vendido».
En ese momento comenzó un altercado que involucró al hombre de negocios, a la mujer y al yerno del matrimonio, Alex Zanatta Bignotto.
Además de los insultos contra De Moraes y sus familiares, una de las personas llegó a agredir físicamente al hijo del ministro.
En otras ocasiones, miembros del STF sufrieron ataques por adeptos extremistas de Bolsonaro.
Zanatta Bignotto, implicado en la confusión, depuso ante la PF y negó que haya proferido ofensas al juez y que los agravios partieron de otras personas agrupadas cerca del ministro.
La PF inició una investigación sobre el caso y pidió ayuda a la fuerza del orden público de Italia, incluyendo acceso a las imágenes de las cámaras del aeropuerto.
El código penal establece que los crímenes cometidos por brasileños en el exterior también pueden quedar sujetos a la ley nacional.
Los involucrados, quienes alegan que hubo un mal entendido, pueden responder por agresión, amenaza, injuria y difamación.
El abogado Ralph Tórtima Stettinger Jr., que representa al matrimonio Mantovani, afirmó el lunes que las imágenes de las cámaras de seguridad del aeropuerto de Roma demostrarán que no hubo agresión.
La versión de los sospechosos se contradice con lo reportado por De Moraes, quien afirmó que él y sus familiares fueron hostigados, y su hijo llegó a recibir una bofetada.
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